La Administración de Proyectos.
La mayoría de las empresas en la actualidad, producto de la competencia a nivel mundial, han desarrollado dentro de su plan estratégico una seria de habilidades, herramientas y metodologías que positivamente, de manera profesional, les ha permitido crecer y alcanzar sus objetivos planteados dentro de su misión y visión. Esto ha generado experiencias a lo largo del tiempo, lecciones aprendidas, activos de procesos e instituciones especializadas que aplican para los distintos tipos de portafolios y programas inmersos dentro de estas empresas, específicamente en gerencias y departamentos.
Los departamentos y gerencias por ensayo y error, se han visto en la necesidad de tomar consideraciones y criterios mucho más meticulosos al momento de plantear y establecer los proyectos, por ende las empresas han establecido oficinas de proyectos y directores de proyectos con conocimientos, habilidades, prácticas y guías como el PMBOOK formadas por instituciones como el Project Management Institute, dándole a los proyectos una prestigiosa importancia bien merecida, por el hecho que estos implican para los objetivos de las empresas.
Ahora bien, los proyectos en las empresas nacen por la necesidad de generar un producto o servicio establecido por las consideraciones estratégicas o el caso de negocio, que pueden ser según el PMBOOK (2008): “demanda del mercado, oportunidad estratégica, solicitud de un cliente, adelantos tecnológicos, requisitos legales, impacto ecológico y necesidades sociales”. Son entonces por estas últimas dos razones mi interés en realizar la maestría en Administración de Proyectos, como profesional en el área Ambiental he tenido la oportunidad de trabajar e informarme acerca de que tanto consideran las empresas la problemática ambiental en sus proyectos y como mitigan las mismas.
Desde mi experiencia, puedo decir que la tendencia de los proyectos y casos de negocios actuales van enfocados principalmente en cubrir las necesidades internas como empresa ante las necesidades ambientales y sociales. He aquí donde con ética y profesionalismo considero que tengo una gran responsabilidad y tarea de poder incluir a los proyectos futuros en los que participe, buenas prácticas orientadas hacia el éxito y reducción del impacto ambiental de estos.
Entre las habilidades interpersonales que me propongo mejorar como futuro Administrador de Proyectos son la comunicación y la negociación, dado que son temas bastante extensos y frecuentemente tareas del día a día en los proyectos. Sin embargo, todas la habilidades interpersonales son fundamentales para el administrador de proyecto, la capacitación constante de estas se deberían considerar como una buena práctica.
Considerar el PMBOOK como guía es indiscutiblemente una metodología de gran utilidad para los proyectos y el AP, esta pudiese garantizar por lo menos gran parte del éxito de un proyecto. Detalladamente por los conocimientos y prácticas vistas en clase, incorporaría para los futuros proyectos en la entrada del Chárter, una evaluación de impacto ambiental, en donde desde el inicio, ya estaríamos involucrando indiferentemente cual sea el propósito del proyecto, aspectos relacionados por el bien social y ambiental. Otros aportes que incorporaría que actualmente no venía practicando, serian: primero basarme en la guía del PMBOOK para que no se escapen detalles entre los grupos de procesos y aéreas de conocimiento de la dirección de proyectos, segundo aplicar las herramientas básicas que nos proporciona la guía como: identificar a los interesados, establecer una bitácora de lecciones aprendidas por cada fase y proceso desde el inicio del proyecto, desarrollar un cronograma, crear la EDT, planificar calidad, comunicaciones y gestión de riesgos, entre otras actividades de relevancia.
En cuanto a la madurez de las organizaciones considero que depende del servicio o producto que esta genere, y los años que tenga en el mercado, debido a que partiendo desde sus experiencias y necesidades para mantenerse en el mercado, es cuando estas establecen su estructura organizacional. Es aquí donde notamos la influencia de la organización en los proyectos, siguiendo esta línea de influencia por parte de las empresas, verificamos las consideraciones y aspectos que esta define para la realización de sus proyectos como: factores ambientales, fases, metodología y activos de procesos. Por otro lado, si es una empresa orientada a los proyectos tendría o formaría una oficina de proyectos ( PMO) que dependiendo de su madurez, equipo de proyecto y recursos humanos establecería la más conveniente.
En mi trabajo anterior por ser una pequeña empresa y con pocos años en el mercado la elaboración de activos de procesos y metodología de trabajo no estaban bien establecidas, por lo cual la improvisación era frecuentemente una manera de hacer los trabajos y tareas, actualmente no laboro en dicha empresa pero de aplicar aéreas de mejoras por los conocimientos actuales aprendidos tendría mucha tela que cortar. Establecer los activos de procesos y metodologías de trabajo considero seria lo primordial, mediante buenas prácticas de proyectos y documentación de estas para ir influenciando a la empresa hacia una cultura organizacional orientada a los proyectos y aplicar todo lo necesario que esto implica.
En conclusión puedo decir que la Administración de Proyectos, al igual que las soluciones para mitigar la problemática ambiental son actualmente temas relativamente nuevos en los que como futuros administradores de proyecto debemos aplicarlos con ética y profesionalismo, para que estos temas sean madurados en las empresas y proyectos que estemos involucrados.
Recomendaciones bibliográficas: